La
morcilla combina perfectamente con sabores dulces como la pera o la manzana y aunque
alguien pueda extrañarse de esta combinación, lo cierto es que es una
delicatessen.
La
morcilla es un embutido y aunque es de los menos grasos, hay que consumirlo con moderación por su
elevado valor calórico. Es una buena fuente de proteína que a demás aporta una
gran cantidad de hierro por lo que es recomendado para personas con anemia o
que practican deportes intensos ya que tiene gran desgaste de este mineral.
INGREDIENTES:
- hojaldre
- una
morcilla de cebolla
- una
manzana reineta
- un
puñado de piñones
PREPARACIÓN:
1. Pelar y cortar la
manzana en gajos finos.
2. Quitar la piel de la
morcilla y deshacerla.
3. Sobre el hojaldre
poner una capa de manzana, encima la morcilla y por último los piñones.
4. Cerrar con la otra capa de hojaldre y
pintar con huevo batido.
5. Hornear a 180º durante 20 minutos o hasta
que se dore.
NOTA:
- Si sobra manzana podemos poner otra capita sobre la
morcilla.
- Aunque se puede consumir fría, lo mejor es tomarla templada.
Mira que no soy mucho de morcilla, pero tengo que decir que esta receta está buenísima, la mezcla con la manzana y los piñones le da un sabor más suave, os la recomiendo en cualquier caso.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario, Beita y muchos besos.
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