Además de ese delicioso aroma que invade la cocina, el secreto de esta receta o su toque especial se deben a:
- el queso (cuanto más, mejor)
- el pan rallado enriquecido y aromatizado con ajo y perejil.
- 2 latas de corazones de alcachofas
- queso en lonchas
- pan rallado con ajo y perejil
- ajo en polvo
- orégano
- aceite de oliva
PREPARACIÓN:
1. Enjuagar las alcachofas bajo el grifo (de esta manera pierden el sabor a conserva).
2. Partir los corazones a la mitad y apretar para eliminar el exceso de jugo, con cuidado para que no se rompan.
3. Colocar en la fuente de horno y cubrir con dos o tres capas de lonchas de queso.
4. Espolvorear con la mezcla de pan rallado con ajo y perejil, un extra de ajo en polvo y por último un chorrito de aceite de oliva.
5. Gratinar unos minutos hasta que esté tostado.
NOTA:
- Aconsejo ser muy generosos con el queso y en el caso de que no guste demasiado, utilizad uno suave.
- Recomiendo que la mezcla de pan rallado con ajo y perejil sea casera y elaborada en ese preciso momento. Igualmente debe hacerse con pan reciente porque el resultado es más esponjoso, muy tierno y la parte gratinada queda crujiente.
- Si queréis aportar otros matices de sabor al plato se puede incorporar jamón serrano o beicon después del queso.